El Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia es la más antigua institución judicial de Europa. Tal honor y raigambre hacen que su reunión semanal, en el lado derecho de la gótica Puerta de los Apóstoles de la Catedral de Valencia,sea punto de encuentro de curiosos y estudiosos que buscan contemplar tal magna institución. Y es que la tradición nos ha legado, desde tiempos remotos, un modelo de justicia que, proveniente del mismo pueblo que busca darse justicia sin protocolos ni fórmulas jurídicas, y que sobrevive dando poderes completos al hombre de la huerta valenciana.
Su orígen arranca sin duda de la civilización romana pues entonces existió una institución para solucionar los conflictos de aguas en Valencia. Sin embargo, fueron los árabes quienes concretaron las formas que aún mantiene. Son varias las costumbres que nos trasladan a aquella época árabe: Por un lado , la reunión en la puerta de la catedral, que antes fue mezquita mayor, surgió por la prohibición de acceso a este templo impuesta con la Reconquista de Jaime I sobre los musulmanes que siguieron cultivando la huerta valenciana, aunque el tribunal funcionara antes en el interior. En segundo lugar , el jueves, día de juicio, corresponde con el sábado del calendario religioso musulmán y las doce del mediodía, hora de inicio, es, con el sol en su cénit, el cambio de día para los mahometanos. Además, aunque ya en desuso, el Presidente concedía la palabra señalando con el pie, no con la mano, igual que hacen, aún hoy, los grandes señores y doctores de la ley musulmana en el desierto.
Aunque varios han sido los intentos de retirar los privilegios del Tribunal de las Aguas en la historia , la institución ha sabido sortear permanentemente esos impedimentos para sobrevivir como herencia solemne de los valencianos . El tribunal se compone de ocho Síndicos que son elegidos por los miembros de cada comunidad de regantes . Entre sus condiciones deben ser labradores y cultivadores directos de sus tierras, cuya extensión debe ser suficiente para poder vivir de ellas, y con fama de hombres justos y honrados . En la actualidad, el Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia está formado por los mencionados ocho síndicos que representan a las acequias que viven del Turia . Los conflictos que se enjuician versan sobre hurtos de agua en tiempos de escasez, rotura de canales o muros, echar agua en campos vecinos para dañar la cosecha, alterar los turnos de riego, tener las acequias sucias impidiendo que el agua circule, regar sin solicitud de turno. Adjuntamos un dibujo de José Benlliure , un grabado de Tomás Rocafort , una preciosa pintura de Ferrandis y una moneda conmemorativa. En suma, nos encontramos con un tesoro histórico de los valencianos que ha perdurado sobre las aguas cada vez más escasas de nuestras huertas y que resuena con la sonoridad del blusón huertano aclamando su parle vosté¡¡¡...
Su orígen arranca sin duda de la civilización romana pues entonces existió una institución para solucionar los conflictos de aguas en Valencia. Sin embargo, fueron los árabes quienes concretaron las formas que aún mantiene. Son varias las costumbres que nos trasladan a aquella época árabe: Por un lado , la reunión en la puerta de la catedral, que antes fue mezquita mayor, surgió por la prohibición de acceso a este templo impuesta con la Reconquista de Jaime I sobre los musulmanes que siguieron cultivando la huerta valenciana, aunque el tribunal funcionara antes en el interior. En segundo lugar , el jueves, día de juicio, corresponde con el sábado del calendario religioso musulmán y las doce del mediodía, hora de inicio, es, con el sol en su cénit, el cambio de día para los mahometanos. Además, aunque ya en desuso, el Presidente concedía la palabra señalando con el pie, no con la mano, igual que hacen, aún hoy, los grandes señores y doctores de la ley musulmana en el desierto.
Aunque varios han sido los intentos de retirar los privilegios del Tribunal de las Aguas en la historia , la institución ha sabido sortear permanentemente esos impedimentos para sobrevivir como herencia solemne de los valencianos . El tribunal se compone de ocho Síndicos que son elegidos por los miembros de cada comunidad de regantes . Entre sus condiciones deben ser labradores y cultivadores directos de sus tierras, cuya extensión debe ser suficiente para poder vivir de ellas, y con fama de hombres justos y honrados . En la actualidad, el Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia está formado por los mencionados ocho síndicos que representan a las acequias que viven del Turia . Los conflictos que se enjuician versan sobre hurtos de agua en tiempos de escasez, rotura de canales o muros, echar agua en campos vecinos para dañar la cosecha, alterar los turnos de riego, tener las acequias sucias impidiendo que el agua circule, regar sin solicitud de turno. Adjuntamos un dibujo de José Benlliure , un grabado de Tomás Rocafort , una preciosa pintura de Ferrandis y una moneda conmemorativa. En suma, nos encontramos con un tesoro histórico de los valencianos que ha perdurado sobre las aguas cada vez más escasas de nuestras huertas y que resuena con la sonoridad del blusón huertano aclamando su parle vosté¡¡¡...
